Es oficial.

Algo que se veía venir desde hace un par de años. Es difícil competir contra las miles de fotos que caben en las tarjetas de memoria, contra la enorme reducción de costos que la fotografía digital significó y que está provocando la desaparición, poco a poco, de la película. Además, hoy en día hay que repetir la foto cientos de veces hasta que uno salga bien, hay que eliminar cualquier rastro de espontaneidad. En los ochentas, la gente se conformaba con un sólo disparo, ya que sólo tenía 10, 12, 24 o 36 exposiciones disponibles en su cámara 110, 35 mm, alguno que otro con una Instamatic de reliquia, o su Polaroid.

Muchos aún estamos reacios a darle a la fotografía digital el crédito que (no) se merece y estamos convencidos de que si bien ha beneficiado la economía de millones de fotógrafos alrededor del mundo, también ha servido para crear una generación espontánea de fotógrafos digitales que si fueran cuestionados sobre los orígenes de la fotografía, la temperatura de color, las capas de la película, las formas de revelado, los visos, la latitud de exposición y demás conocimientos básicos para alguien que se autodenomina fotógrafo, sorprenderían al mundo con su ignorancia.

Hace unos días Polaroid anunció que se retirará de manera permantente de la manufactura de película instantánea. Empezó con la descontinuación del formato 600, del cuál sólo queda el último lote, dificil de conseguir en tiendas, y a precios exhorbitantes. Y es comprensible. Quiénes compraban aún película instantánea, además de los empeñados en no dejar morir el formato, los nostálgicos de vanguardia, los que aún estamos enamorados de la texura y los colores que se obtenían? Ya no era costeable, ni siquiera para nosotros. Era un gusto muy caro. Aún es posible encontrar el formato 600 perdido por ahí. Los demás son más comunes, pero sólo hasta el 2009, cuando se calcula que se terminarán los lotes que están produciendo como despedida.

Las vacaciones no serán las mismas, el fuera de foco con tonos pastel que tanto nos cautiva no veoverá a verse.

Lo único que podemos hacer es disfrutarla mientras aún existe. Por mi parte, me coordinaré con los muchachos de ACNE para organizar el Instant-O-rama de este año, y esperemos que podamos hacer otro el próximo. A disparar!!!

fotos: Alejandro Gallo, para el Instant-O-rama 2006.